Abr-2015
Bebe Fumo
El equipaje de ida es una cuchara, un balde y un saco vacío. El de la vuelta es una bolsa llena de “bebe fumo”.
Varias familias de Acupe se sustentan recogiendo una especie de marisco que lleva ese curioso nombre de “bebe fumo”.
El camino a pie es largo hasta llegar a Salinas, una región de “marea”, como nos dicen por aquí. Con la marea baja esos caracolitos rellenos están disponibles para quien se agacha sobre la arena y excava el suelo con una cuchara de cocina o de albañil.
Encontrar es fácil, lo difícil es llenar sacos y más sacos para conseguir hacer valer el costo del trabajo. Un saco de aproximadamente 10 kg de “bebe fumo” rinde, después de cocinado y retirado de la concha, un promedio de 2kg de mariscos. Con el valor del quilo a R$ 10,00, una jornada de trabajo de una familia que vive de “bebe fumo” rinde alrededor de R$ 20,00.
A los niños les gusta acompañar a sus padres hasta Salinas. Van los fines de semana, ya que la escuela aquí es de todos.
Llenar un baldecito es suficiente para que muchos niños se sientan integrantes del trabajo familiar y sigan para otros intereses, como construir castillos, puentes, casas, ríos y bañarse.
Texto y fotos: Renata Meirelles
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